Cómo prolongar los efectos de una buena exfoliación

almafloraae
16 jul
2 Min. de lectura

La exfoliación es una de las mejores formas de renovar tu piel, pero su verdadero poder no termina al salir de la ducha. Una buena exfoliación puede tener efectos duraderos si sabes cómo cuidarte después. En esta entrada te compartimos consejos prácticos y holísticos para que los beneficios de tu rutina exfoliante se prolonguen por más tiempo ✨.

Entiende qué sucede tras exfoliarte

Cuando exfolias tu piel, eliminas las células muertas que opacan su brillo natural. Esto permite que los productos que apliques luego se absorban mejor y que la piel respire. Sin embargo, tras la exfoliación la piel queda más receptiva... y también más vulnerable.

Por eso, el cuidado posterior es esencial. Una exfoliación bien hecha es solo el primer paso de un proceso de regeneración que puede durar días si lo apoyas correctamente.

Hidratación: el paso que marca la diferencia

El mejor momento para hidratar es justo después de exfoliar. Usa productos ricos y naturales que ayuden a sellar la humedad y a calmar la piel. En Alma Flora te recomendamos nuestras mantequillas hidratantes (https://www.almaflora.net), elaboradas con aceites esenciales y texturas nutritivas:

Rosas: ideal para contención emocional y nutrición profunda
Manzanilla: calma y suavidad para pieles sensibles
Naranja: energizante y revitalizante
Vainilla: reconfortante y envolvente

La combinación de textura y aroma convierte este paso en un ritual de bienestar.

Aceites esenciales: aliados de larga duración

Los aceites esenciales pueden prolongar los beneficios de tu exfoliación gracias a sus propiedades terapéuticas y su capacidad de penetración en la piel. Puedes aplicar unas gotas en tu crema corporal o difundirlos en tu espacio de descanso. Algunas opciones recomendadas:

Lavanda: relajante y regeneradora
Romero: estimula la circulación
Ylang ylang: equilibra emociones y embellece
Jengibre: energizante y desintoxicante

Si quieres saber más sobre cómo integrar los aceites esenciales a tu rutina, visita nuestra entrada.

Mantén la constancia sin excederte

No necesitas exfoliarte todos los días para mantener tu piel sana. De hecho, hacerlo en exceso puede irritarla. La frecuencia ideal depende de tu tipo de piel:

Piel grasa o normal: 2 veces por semana
Piel seca o sensible: 1 vez por semana

Entre sesiones, mantén tu piel limpia, hidratada y protegida del sol. Esto ayudará a que los efectos duren más tiempo y que tu piel se regenere de forma natural.

Potencia el efecto con nuestras sales exfoliantes

Las sales exfoliantes Alma Flora son otra forma de prolongar la vitalidad de tu piel. Puedes usarlas como baño relajante o como complemento de tu rutina:

Brisa Herbal: con eucalipto, menta, ciprés y jengibre
Vitalidad Cítrica: con limonaria, romero, ciprés y jengibre
Frescura Tropical: con lavanda, ylang ylang, citronela y jengibre

Estas mezclas ayudan a remineralizar, suavizar y perfumar la piel, potenciando el efecto de tu exfoliación inicial.